Ardanza, que por la mañana visitó a la familia del industrial en su domicilio de Irún, pronunció un discurso ante cerca de unos 200 simpatizantes, a los que dijo que "el mayor enemigo de los vascos está dentro de nuestra propia casa, en una casa en la que ser empresario o salir adelante por medio del trabajo se ha convertido en crimen".

"No creo que sobren hombres y mujeres que, como Aldaya, sean capaces de crer empresas y puestos de trabajo", recalcó el lehendakari.

Por su parte, el miembro de la Ejecutiva guipuzcoana del PNV Juan María Juaristi aseguró que Aldaya se encuentra "secuestrado sin ningún tipo de derecho por quienes reclaman para si los derechos humanos, pero que son los primeros en conculcarlos".

Por ello, pidió que se aunen esfuerzos en torno a proyectos renovadores, "como el nuestro", ante los ejemplos de violencia del entorno de HB.

El candidato peneuvista a la alcaldía de Irún, Jsé Antonio Izagirre, aseguró que tras el secuestro de Aldaya el sector del transporte vive un profundo malestar y existen dudas "sobre si hay que seguir adelante en estas condiciones de violencia".

El lehendakari destacó el desarrollo de la comarca del Bidasoa, pese a haber soportado una gran depresión económica en la eliminación de las fronteras. En este sentido, apuntó que este hecho ha supuesto una "mayor recuperación económica y cultural entre los vascos".

Asimismo, puso como ejemplo de "tenaidad, trabajo constante y coordinación", al equipo de balonmano Elgorriaga Bidasoa, que ha conseguido esta temporada el Campeonato de Liga español y la Copa de Europa.