El portavoz ocialista hizo estas declaraciones durante una rueda de prensa al ser preguntado por la privatización de Argentaria acordada hoy por el Consejo de Ministros.

"Entre la virtud y el vicio sólo hay un elemento, que es la cantidad", argumentó frente a quienes puedan utilizar la venta de empresas públicas por parte de anteriores gobiernos para restar peso a las críticas del PSOE.

Igual que un vaso de vino puede ser "beneficioso" para la salud pero cuatro botellas hacen que el hígado de resienta, explió el portavoz socialista, "tampoco es lo mismo privatizar sin tino que con prudencia".

"Si se privatiza con moderación, con prudencia, pensando en los intereses generales y en mejorar la eficacia de las empresas", agregó, la trayectoria puede ser "correcta", pero si el único objetivo es "hacer caja", el país puede terminar "esquilmado".

Como ejemplo, reiteró que los ciudadanos aún están pagando la privatización de Telefónica y recordó las reiteradas peticiones de los socialistas para que el Gobieno remita al Parlamento los informes de calidad de servicios de la compañía, que elabora cada tres meses y que siempre han sido conocidos. "Qué casualidad, llevamos un tiempo que no se hacen públicos", apostilló.