Cueto declaró a Servimedia que las negociaciones se frustraron porque el Gobierno central no entregó la documentación que había preparado al respecto hasta el pasado 15 de noviembre. "Lo que ha ocurrido ha sid que un gobierno, el central, ha puesto por delante de los intereses de los asturianos el de su partido", dijo.

Las discrepancias entre ambas administraciones tienen su origen en la reforma del Hospital Central de Asturias que, a juicio del Principado, reduce su superficie y capacidad funcional "sin justificación previa".

En cuanto a la postura que el PP asturiano está manteniendo en esta polémica, el consejero la atribuyó a "la burda actuación de un partido político que, en Asturias, hace mucho iempo que ha perdido la brújula, empujado por políticos ambiciosos".

El Principado exige que la reforma del edificio del hospital garantice la unidad funcional y una superficie suficiente ahora y a largo plazo, de forma que no sean necesarias tomar medidas cada 7-10 años ni la construcción de "un sinfín" de edificios anexos.

Antonio Cueto añadió que la decisión tomada al respecto por el Gobierno central ha sido "unilateral", e insistió en que el Hospital Central es propiedad compartida de ambas aministraciones. Señaló, además, que el cálculo de costes no ha sido realista.

El consejero negó que el Principado se encuentre solo en esta disputa, puesto que tanto el PSOE e IU como los sindicatos también han rechazado la propuesta del Insalud.