En una nota de prensa, el presidente de ATA, Lorenzo Amor, sostiene su rechazo a esta prohibición "puesto que, en la mayoría de los casos, es su principal fuente de ingresos".

"Los quiosqueros son un colectivo de autónomos que trabajan siete días a la semana, festivos y más de doce horas diarias y no hay derecho a que se les castigue de esta manera. Esta ley antitabaco tiene como fin que la población deje de fumar, no arruinar a los vendedores de prensa", denunció Amor.

Por otro lado, el presidente de ATA compartió la propuesta planteada por los estanqueros al Gobierno de fijar un precio mínimo de 2 euros por cajetilla de tabaco, para evitar una importante caída de los ingresos.