Así lo afirmó en una entrevista en Onda Cero, recogida por Servimedia, después de que 26 magrebíes se fugaran de las dependencias de la Policía Nacional del Aeropuerto de Barajas.

La presidenta regional exigió conocer qué política migratoria va a tener el Gobierno, aunque constató que sabe que "necesita los votos de Coalición Canaria para estar al frente del Gobierno y para que le salgan los números", pero "no puedes comprar los problemas a cambio de votos o escaños sin medir las consecuencias".

A este respecto se preguntó "qué mensaje estamos mandando a las mafias cuando les dices que puedes mandar miles de personas a las Islas Canarias, que ya el Gobierno los manda por avión a la Península con nocturnidad y quita el problema".

Por ello, comentó que la situación le parece "bastante preocupante", porque "lo único que estamos demostrando es que todavía es más fácil hacer negocio con la inmigración si los mandas a Canarias".

Ayuso denunció que "no se está tratando el problema en origen ni se está sentando en la mesa a esos países de origen que están dejando abandonada a su suerte a su gente en el mar, ni se está hablando con las autoridades europeas para pedir ayuda y no dejar abandonada a Canarias".

La presidenta de la Comunidad de Madrid insistió en que, "por la noche, como hemos visto esta Navidad, han estado enviando a los inmigrantes a distintos puntos de la geografía española, especialmente a localidades y comunidades donde gobierna el Partido Popular".

En este sentido, continuó, "nosotros estamos encantados de ponernos a trabajar para buscar la mejor solución para estas personas", pero matizó que "lo que no se puede hacer es mandarlas por las noches sin que las autoridades locales y autonómicas, que son quienes más competencias tienen en materia sanitaria y social, sepamos quiénes son, de dónde son o qué edades tienen. No sabemos cómo ayudar ni cómo tratar ni cómo solucionar esto".

Ayuso consideró que ese "descontrol" del Gobierno central "provoca situaciones anómalas por completo, de dejación de funciones", por lo que "creo que es una cuestión que el Gobierno tiene que abordar".

Por último se quejó de la "poca ayuda" que reciben las ciudades o comunidades a las que van estos inmigrantes. "Por mucho que miren a otro lado, no se va a solucionar y me parece de una irresponsabilidad absoluta", concluyó la presidenta regional.