El episodio se produjo en el Pleno de la Asamblea madrileña, cuando Monasterio preguntó a Ayuso sobre si su Gabinete garantiza “la igualdad de oportunidades de todos los madrileños”.

La portavoz de Vox aludió a la decisión de su partido de no apoyar la deducción que el Ejecutivo regional había planteado para atraer inversiones extranjeras, que se vota esta jornada en la Cámara regional. Sostuvo que esta medida, que será rechazada con los votos de Vox y la izquierda, suponía discriminar a los madrileños frente a los “extranjeros”.

A este respecto, Ayuso reprochó a Monasterio que distinga entre “los de fuera” y “los de dentro” y que no entienda que Madrid es una “región internacional” que debe competir por traer capitales de fuera.

“DISTINTOS, PERO NECESARIOS”

Al mismo tiempo, agradeció a Vox las veces que le han apoyado esta legislatura, pero afirmó que “a partir de hoy es bueno que cada uno siga su camino”. Asimismo, censuró la “deriva” de la formación de Monasterio y dijo que le PP no les va a secundar en su estrategia política.

“A mí no me van a arrastrar”, dijo Ayuso, quien aludió a que, además de la medida para atraer inversión extranjera, su Gabinete ha aprobado esta legislatura 21 deducciones fiscales.

Además, censuró la posición de Vox y que haga política desde una “pretendida superioridad moral” y se dediquen a esperar “sentados” a que el PP pueda cometer alguna equivocación a la que sacar partido.

Por su parte, Monasterio indicó que su partido no podía apoyar la “ley de privilegios para extranjeros” que plantea Ayuso, puesto que no se puede “discriminar” fiscalmente a los madrileños y a los que llevan tiempo “aguantando” al Gobierno de Pedro Sánchez.

La portavoz de Vox defendió la “igualdad de condiciones” para todos los que viven en la región y sostuvo que abogar por esto es “de sentido común”. Concluyó que es una “pena” que no haya sido mejor el “clima de entendimiento” entre PP y Vox, ya que se trata de partidos “distintos, pero muy necesarios”.