En la presentación de su libro ‘Orden y Libertad’ organizado por la Fundación Rafael del Pino, Aznar se permitió compartir este reflexión ante el jefe de la oposición, que atendió su discurso desde la primera fila después de que su partido interrogara al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Senado.

Aznar sostuvo que lo ocurrido en la Cámara Alta fue “otra demostración” de “la pérdida de responsabilidad política” del jefe del Ejecutivo, pero evitó este tema en la medida posible y se deshizo en halagos a Feijóo, de quien destacó que es “prudente” y tiene “coraje, determinación, convicción y valor”.

Sin embargo, ante el runrún por la posible presentación de una moción de censura instrumental ahora que Junts ha roto su acuerdo de investidura con Sánchez, le advirtió de que “le criticaría, incluso públicamente, si alimentase la frustración de los españoles” con una moción de censura fallida.

“Alimentar la frustración es llevar al país a un callejón sin salida”, dijo. “Se pueden hacer muchísimas cosas, pero si no hay materiales para una moción de censura, y no los hay, pues habrá que esperar a las elecciones”. A su juicio, intentar desbancar a Sánchez de La Moncloa sin apoyos solo lograría “generar más desasosiego y posiciones extremistas” cuando “el juego consiste en tener una mayoría nacional a la que se llame para enderezar y poner orden en el país, y garantizar la convivencia y la libertad en el país”. “Y esa es la política que, en mi opinión, está siguiendo Alberto Núñez Feijóo”, añadió.

Por otro lado, Aznar reconoció que ser jefe de la oposición “no es fácil” y que, por eso mismo, “hay que intentar abreviar el periodo de la oposición”. Pero insistió en que se debe hacer sin “imprudencias” que puedan generar más “ansiedad” o “melancolía” por “las expectativas frustradas”.

Por último, Aznar apeló a “la responsabilidad ciudadana” para que el espacio de la “centralidad” vuelva a gobernar el país. “España tendría una oportunidad políticamente formidable en el mundo si desde la centralidad política transmite que es posible el cambio y que es posible las transformaciones decididas en una sociedad fundamental. Esa oportunidad es para España, no solamente para el Partido Popular. No es un desafío para una persona, que también. No es un desafío para una fuerza política, que también. Es una oportunidad para España que es mucho más importante todavía”, concluyó.