Al presentar una conferencia del secretario general de Comisiones Obreras, José María Fidalgo, en los cursos de verano de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales, Aznar aseguró que España atraviesa "momentos políticos difíciles" y necesita reformas que contribuyan a evitar problemas en el futuro.

"Vivimos una situación económica en la cual hay que prever antes que dedicarse a curar y hay que reformar antes que dedicarse a no hacer nada", dijo. "Una economía no puede aspirar a vivir de la inercia del pasado, de las rentas del pasado, permanentemente, sin hacer nada o sin hacer prácticamente nada, porque eso al final es asumir una inmensa responsabilidad de cara el futuro".

Aznar manifestó que España "necesita más reformas, necesita más liberalización, necesita más flexibilidad, como el camino adecuado para tener más solidaridad y más posibilidades y oportunidades de empleo para todo el mundo".

El ex presidente del Gobierno alabó al máximo responsable de Comisiones Obreras, con quien, recordó, alcanzó diversos acuerdos durante sus dos mandatos al frente de La Moncloa, como el acuerdo para racionalizar el Sistema de la Seguridad Social en 1996 y el acuerdo de las pensiones en 1999.

Aznar calificó ese periodo como "uno de los más fructíferos en materia de acuerdos" e hizo un llamamiento para continuar en la actualidad con más reformas económicas, dado que "los españoles no pueden pensar que la coyuntura actual va a continuar indefinidamente".

El presidente de la Fundación FAES destacó el "gran sentido de la responsabilidad" de Fidalgo, su "vocación muy marcada por el diálogo y las opiniones de todos" y su apoyo al desarrollo de elementos "vertebrados y cohesionados" en España.

Por su parte, Fidalgo agredió los elogios del presidente de la Fundación FAES, si bien calificó de "exagerada" la descripción que había hecho de su persona y de su trayectoria política. Reconoció que mantiene una buena "relación profesional" con Aznar, que les permite "echar de vez en cuando una parrafada".