Los populares entienden que es necesario asegurar la conjunción entre las dos áreas del nuevo ministerio para garantizar la independencia entre dos distintos poderes del Estado: el Ejecutivo y el Judicial.

La fusión de Interior y Justicia ha sido recibida con aplausos por parte de los sindicatos policiales y con una clara oposición or parte de las asociaciones de jueces y magistrados.

Estas últimas temen que los planteamientos de Interior, siempre más proclives a poner en un primer plano la seguridad, menoscaben las exigencias del Ministerio de Justicia, normalmente más inclinado a hacer hincapié en los derechos y libertades de los ciudadanos.