BODA INFANTA. DECENAS DE INFORMADORES SE QUEDAN PLANTADOS ESPERANDO LA LLEGADA DE LA INFANTA Y SU MARIDO A LANZAROTE

ARRECIFE DE LANZAROTE
SERVIMEDIA

Decenas de periodistas que se habían desplazado a la isla de Lanzarote se han quedado plantados tras esperar durante dos días la llegada de los recién casados duques de Lugo, la infanta Elena y Jaime de Marichalar, a la residencia de La Mareta, en el municipio de Teguise.

Los rumores de que la pareja viajaría a Lazarote provocaron una avalancha de informadores de la mayoría de medios canarios y nacionales hacia esta isla.

Los redactores gráficos han montado guardia permanente en el aeropuerto de Guacimeta y a las puertas de la residencia, donde se preparó todo para la llegada de la pareja de recién casados. El personal de servicio de la residencia llegó incluso a poner botellas de champán en los congeladores de La Mareta, ya que se creía que la llegada era inminente.

La expectación creada se extendió a lamayoría de la población de la isla, que se disputaba un puesto de observación en la residencia real con periodistas y extranjeros, a los que también le había llegado el rumor de que se esperaba a alguien importante.

La palabra que más se oye en las últimas horas en las calles de la isla de Lanzarote es la de "decepción", ya que se esperaba con ilusión la visita de la pareja que ha concitado la atención de la vida española durante las últimas semanas.

Sin embargo, aún no se ha perdido la esperanzadel todo, ya que cabe todavía la posibilidad de que después de ser recibidos por el Papa puedan reconducir sus vacaciones hacia la isla canaria.

Mientras tanto, los informadores ya han comenzado a recoger las cámaras y emprenden la vuelta a sus sedes centrales, a la espera de la próxima oportunidad para captar la imagen o frase de la pareja de moda.

(SERVIMEDIA)
22 Mar 1995
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