Así lo aseguró en los pasillos de la Cámara Alta durante el debate previo a la votación de la nueva norma, que reconoce como víctimas a las personas que padecieron persecución o violencia por razones políticas, ideológicas, de conciencia o creencia religiosa, de orientación e identidad sexual, durante el período comprendido entre el golpe de Estado de 1936, la Guerra Civil y la Dictadura franquista hasta la promulgación de la Constitución española de 1978.

Félix Bolaños afirmó que “la Ley de Memoria va a ser una realidad bien pronto y esto es lo importante”, ya que, añadió, gracias a ella “de una vez por todas va a saldar una deuda que tenemos con millones de españoles y de españolas que fueron víctimas de la Guerra Civil, fueron víctimas de la represión franquista”.

En la misma línea, el ministro subrayó que salda una deuda con aquellos “a los que tanto debemos en la España que ellos soñaron y por la que ellos lucharon en su momento y trabajaron”. Se trata, agregó, “de la España de hoy, una España democrática, por eso la memoria es democracia y por eso esta es una ley que está al lado de las víctimas”.

Al respecto, consideró que “permitir a personas, normalmente muy mayores, que encuentren los restos de sus seres queridos no es ni de derechas, ni de izquierdas, es pura humanidad”. Y agregó que es una ley que “reivindica el valor de la Transición, de la Ley de Amnistía, que es la base de nuestra democracia, por eso decimos que la democracia es mejor hoy”.

Por último, el ministro señaló que le hubiera gustado “que la derecha española suelte lastre definitivamente y hubiera apoyado una ley de Memoria, que es homologable con todas las leyes europeas de todos los países de nuestro entorno que han sufrido dictaduras”.