Bolaños hizo esta afirmación en el Pleno del Congreso, donde la diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo le preguntó qué hará “cuando regrese a España” el “prófugo” Carles Puigdemont.

El ministro respondió a Álvarez de Toledo que su partido tenía “nostalgia” de Puigdemont, algo que atribuyó a que PP y Junts son “dos caras de la misma moneda, separadores y separatistas, todos unidos en esa nostalgia por el año 2017”, año en el que se celebró el referéndum ilegal del 1-O.

Por este motivo, ironizó con que las formaciones que lideran Alberto Núñez Feijóo y Puigdemont podrían presentarse en coalición a las elecciones y sugirió el nombre de “Junts pel Conflicto” (Juntos por el Conflicto).

MINISTRO “PRESO”

Por su parte, Álvarez de Toledo señaló que el expresidente catalán es un “prófugo con voluntad de reincidir” y que será un problema para el Gobierno porque la ley de amnistía “se aprobará, pero no se aplicará”.

La diputada acusó a Bolaños de callar como un “difunto” cuando la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, ataca a los jueces, silencio que atribuyó al “pacto” por el que esta formación independentista mantiene en el poder al presidente Pedro Sánchez.

Concluyó que los datos anteriores implican que quien es un “preso” es el titular de Presidencia, ya que tanto él como el Ejecutivo dependen de lo que haga el exresponsable de la Generalitat.