En rueda de prensa, el ministro expresó su confianza en que estas organizaciones, con las que la Administración seguirá negociando esta tarde, se darán cuenta de que no hay otivos suficientes para la huelga y de que los paros provocarían "daños desproporcionados a las empresas y los consumidores españoles".

Explicó que Hacienda ha hecho un "gran esfuerzo" al reducir el aumento impositivo del gasóleo en un 30 por ciento sobre las previsiones iniciales e insitió en que la subida final en surtidor será de entre dos y tres pesetas. En consecuencia, el gasóleo estará más barato el 1 de enero de 1992 que en la misma fecha del 91.

Borrell expresó su confianza en que se puea alcanzar un acuerdo con las patronales de camioneros, al igual que se hizo con los sindicatos del sector aéreo, a fin de poder empezar el año con normalidad en todo el sector del transporte.

Para ello, aseguró que la Administración está dispuesta a buscar una solución a los restantes problemas del sector, para el que Fenadismer y Conetrans reclaman un plan de jubilaciones anticipadas, el reconocimiento de las enfermedades profesionales y créditos subvencionados a la compra de camiones.

Las dos rimeras reivindicaciones están pendientes de los estudios que realiza el Ministerio de Trabajo para estimar el coste que tendría su aplicación.

Conetrans considera que el plan de jubilaciones podría aplicarse escalonadamente, de manera que en una primera fase pudiesen acceder a él unos 1.500 camioneros mayores de 60 años, con el cien por cien de la base reguladora por la que estén cotizando a la Seguridad Social en el momento del retiro.

En su opinión, los primeros que deberían tener la posibilidd de acogerse a estas prestaciones son, en atención a la dureza de su trabajo, los conductores de vehículos pesados que están en activo (unos 75.000) y que cumplan los requisitos establecidos.

Por otra parte, la Federación Estatal de Asociaciones de Transportistas (Fedatrans) hizo público hoy un comunicado en el que asegura que el paro convocado por Fenadismer y Conetrans obedece a "motivaciones políticas".