Botín intervino en la Junta General de Accionistas que la entidad celebra en esta ocasión de manera exclusivamente telemática, tras aprobarse un cambio en los estatutos para ello.

La presidenta del Santander se refirió a la “incertidumbre geopolítica” y la “alta volatilidad” en los mercados que se está viendo en los primeros meses del año. “Los recientes anuncios en Estados Unidos sobre aranceles reflejan un aumento de las tensiones comerciales”, afirmó Botín, y añadió que los mercados en los que opera el banco “siguen mostrando resiliencia” y el desempleo está en mínimos históricos o cerca en dos tercios de los mercados principales.

En el caso de España, indicó que se espera que crezca un 2,5% en 2025, por encima de la media europea, y en Europa se presenta “un gran desafío, y también una gran oportunidad”. Botín subrayó que “hace mucho tiempo que no se veía tanto entusiasmo entre los inversores institucionales por invertir en Europa”.

Botín instó una vez más a “pasar a la acción” y hacer cambios para “crecer más y mejor”. Recetó a Europa aumentar la inversión, lograr más innovación y que esta se traslade al sector productivo.

Consideró que los pasos que se están dando “son muy positivos”, pero llamó a “hacer más”, reconociendo que la mayoría de países tiene un margen fiscal limitado para “recortar impuestos o aumentar el gasto”.

En esta situación, destacó que el sector bancario europeo es “fuerte” y tiene unos niveles de capital para afrontar las necesidades de financiación. Para ello, dijo que “no requiere nueva legislación”, sino “simplificar” la existente.

También propuso acometer reformas estructurales para equilibrar las cuentas públicas, impulsar un entorno “más favorable” a la inversión privada, atraer talento y un contexto institucional que permita crecer a las empresas y las que se creen se queden en Europa.

En cuanto al negocio del Santander, Botín reiteró los objetivos que se habían trasladado para este año pese a las tensiones comerciales y resaltó que la diversificación del banco actúa como “estabilizador en un entorno global incierto” en el que la previsión de crecimiento de la economía mundial a cinco años es del 3,1%, “la más baja de los últimos 16 años”.

SANTANDER "SIGUE SIENDO" OPORTUNIDAD DE INVERSIÓN

La máxima responsable del banco reiteró a los accionistas la remuneración anunciada para los dos próximos años y destacó que “es la más alta de la historia”. El objetivo del banco es distribuir hasta 10.000 millones de euros en recompras. La política de retribución pasa por entregar aproximadamente el 50% del beneficio neto a partes iguales entre efectivo y recompras.

“El año pasado decíamos que Santander era una oportunidad de inversión única y, a pesar del buen comportamiento reciente, creemos que lo sigue siendo”, afirmó.

Por su parte, el consejero delegado del Santander, Héctor Grisi, repasó las cifras de 2024 y destacó el beneficio récord que obtuvo la entidad, con 12.574 millones, así como que se superaron todos los objetivos financieros marcados.

“El buen punto de partida que supuso el cierre de 2024 para la economía global nos permite abordar la posible inestabilidad por ciertos riesgos de índole geopolítica durante este año”, dijo Grisi, y agregó, en línea con Botín, que es en momentos de “incertidumbre” cuando “la diversificación cobra mayor importancia, actuando como elemento estabilizador”.

Grisi se mostró convencido de que la entidad logrará superar este año el beneficio récord del anterior y mejorar la rentabilidad en los negocios de Consumer, Corporate and Investment Banking (CIB) y Payments, así como consolidar los “altos niveles de negocio” en Wealth. Para retail, se espera mantener una rentabilidad “sólida”.