Este dividendo es un 70% superior al del ejercicio anterior y representa un ‘pay-out’ o porcentaje del beneficio destinado a dividendo del 60%. Esto supone abonar a los accionistas, entre ellos el Estado, un total de 2.890 millones.

Para remunerar a los accionistas, el banco ha aprobado un plan de recompra de acciones por importe de 500 millones, que también se someterá a votación hoy.

En cuanto al consejo, en el orden del día consta la reelección de María Verónica Fisas como consejera independiente por un periodo de cuatro años.

Igualmente, se someterá a votación delegar al consejo para que pueda emitir valores eventual o contingentemente convertibles en acciones para atender requerimientos de capital por un importe total máximo de hasta 3.500 millones, la política de remuneraciones de los consejeros, las cuentas anuales de 2023 y la reelección de PwC como auditor en 2025.

En su carta a los accionistas con motivo de la Junta, el presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, señala que en 2023 el banco creció “de una forma rentable y sostenible” y consiguió un beneficio neto de 4.816 millones, un 54% superior al de 2022. De cara al año 2024, pretende “seguir apoyando y acompañando a las familias y empresas para, de este modo, contribuir al crecimiento y al bienestar de la sociedad”.

La Junta de CaixaBank coincide con la protesta de los sindicatos para pedir una mejora de la propuesta de subida salarial para el convenio sectorial de banca, si bien este no afecta a CaixaBank, que está englobada en el convenio de ahorro. En éste se alcanzó un acuerdo la semana pasada para subir los salarios un 11% hasta 2026 y un pago único adicional a cada trabajador de 1.000 euros a abonar este año.