Así lo afirmó tras la reunión que los coordinadores del programa electoral del PSOE para las elecciones generales del próximo 23 de julio celebraron en Ferraz, donde Calviño compareció en rueda de prensa –por primera vez en la sede del PSOE– y defendió que “no es el momento de parar” las medidas del Gobierno “y volver para atrás”.

En este sentido, indicó que el candidato del PP para ser presidente del Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, solo ha hablado de “derogar” y el contenido de su agenda política se ha basado “en la nada” en lo que se refiere a la economía. Por ello, dijo que es “urgente” conocer las principales propuestas del líder de la oposición porque “con las cosas del comer no se juega”.

“Cuanto antes deberíamos tener ese debate específico de política económica con la persona que vaya a coordinar ese programa electoral" en el PP en el ámbito económico, dijo, convencida de que los ciudadanos conocen cuál es la política económica del Gobierno liderado por Pedro Sánchez y "enfrente no sabemos ni qué, ni quién ni para qué”, declaró. Sin entrar a valorar opciones de las personas que podrían confrontar con Calviño, desde el PSOE demandan este debate y consideran que debería ser "cara a cara" en materia económica para que se confronten los modelos con opciones de aplicarse desde La Moncloa.

Desde el PSOE quieren ahondar en la cuestión económica porque "no se juega con las cosas del comer", remarcó Calviño desde el atril de Ferraz en el que eludió cuestiones orgánicas y ensalzó que está perfectamente alineada con el presidente del Gobierno así como que el "socio minoritario" de la coalición, Unidas Podemos, "no ha tenido prácticamente influencia en la política económica del Ejecutivo".

En este sentido, indicó que esta legislatura hicieron un "gran esfuerzo para mantener la estabilidad de este Gobierno de coalición" porque lo importante era demostrar la estabilidad política y del Ejecutivo en España ante el contexto internacional.

De hecho, Calviño presumió del tándem que hace con Sánchez, y al que demostró su lealtad pese a no ir en las listas electorales "por una decisión personal" ni afiliarse al partido, porque "el presidente es una persona tremendamente respetuosa" y con la que ha "trabajado muy juntos durante estos cinco años".

"Nos conocemos los dos bien, el presidente está muy alejado de esa imagen que algunos quieren construir en el ámbito público, tenemos un alineamiento total desde el punto de vista económico en nuestro país, y eso hace que estemos los dos muy cómodos trabajando juntos ahora y en el futuro", apostilló la vicepresidenta dejando clara su disposición a seguir en la próxima legislatura tras el 23-J.

Calviño compareció tras una "fructífera" reunión de trabajo de Sánchez con la presidenta del PSOE, Cristina Narbona; la vicesecretaria general y ministra de Hacienda, María Jesús Montero; la secretaria de Estudios y Programas, Idoia Mendía; el secretario para la Reforma Constitucional y Nuevos Derechos y ministro de la Presidencia, Félix Bolaños; la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera; el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá; y la europarlamentaria de la Delegación Socialista Española en la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas, Lina Gálvez.

La vicepresidenta no avanzó nada del programa económico, pese a que el PSOE ya trabaja sobre un borrador del programa de gobierno para los próximos cuatro años porque consideran que deben concluir un proyecto iniciado estos años en los que han abordado "lo urgente sin perder de vista lo importante".