Además reconoció que en un primer momento la incorporación podría ser valorada muy positivamente por el electorado, un efecto que, a su juicio, se difuminará cuando los votantes reflexionen sobre las motivaciones de la inclusión.

"La gente saca las conclusiones a esos porqués, sacas sus conclusiones y luego vota libremente, porque forma parte de una sociedad madura", explicó. Cuiña no aclró a qué aludía en concreto, aunque sí dijo que "Garzón no tendrá mi voto".

Por su parte, José Manuel Beiras, líder del Bloque Nacionalista Galego (BNG) dijo comprender que la derecha esté "rabiosa, porque no puede decir que Garzón sea un corrupto y tendrá difícil hacer comprender a los ciudadanos que Garzón acepte ese compromiso con un partido con gentes acusadas de corrupción, con fundamento. Es su problema: que metan en sus listas a personas próximas a su ideología".

Mientras tanto, fuentes de PSOE gallego insistieron en defender que Felipe González pueda hacer los cambios que crea oportuno en las listas gallegas, porque cuenta con todo el apoyo del partido.

También indicaron que la inclusión de Garzón en Madrid y Ventura Pérez Mariño en Lugo pone de manifiesto la voluntad del partido de luchar contra el narcotráfico y todo tipo de corrupción.

Para el secretario general del PSOE gallego, Antolín Sánchez Presedo, la decisión es una muestra de apertura a la sociedad. El partido quiere sguir estas línea y prevé incorporar también independientes por su labor social, según fuentes de la Ejecutiva.