"La valoro muy positivamente, porque son unas instrucciones que suponen a todas luces una vulneración del derecho de igualdad de los españoles ante la ley", afirmó Del Castillo a Radio Nacional.

Según la ministra, si se cumplieran esas directrices, se podrían ocasionar daños difíciles de reparar a niños procedentes de comunidades distintas al País Vasco, a los que se les obligaría a recibir clases con una presencia excesiva de euskera.

En su opinión, la decisión del Tribunal Superior sólo es de momento una suspensión cautelar, pero representa ya un "indicio importante" para lo que puede ser la sentencia definitiva "porque vulneran derechos fundamentales".

En otras declaraciones a Onda Cero, Del Castillo subrayó que "hay que dejar sin efecto esas instrucciones que vulneran derechos fundamentales, y esperar la sentencia correspondiente".