La CAVE hace esta petición con motivo de las cartas remitidas por Telefónica a los clientes, en las que se les solicita permiso para tratar toda la información que laempresa tiene sobre ellos, incluida la referida a la factura de teléfono, y se informa de que, si no se produce una prohibición expresa, se dará por entendido el consentimiento.

"Dicha notificación, enviada junto a la factura habitual, es escueta y no aclara convenientemente el tipo de datos que obran en su poder ni los usos para los que Telefónica solicita la autorización de sus clientes", señala la CAVE en un comunidado difundido hoy.

La organización de consumidores rechaza la fórmula del consetimiento tácito, que el plazo legal de respuesta para los usuarios se reduzca a un mes y que sea el cliente el que corra con los gastos de envío de la desautorización.

"CAVE entiende que no existen suficientes garantías para el usuario de que dicho escrito de desautorización ha llegado a manos de la empresa Telefónica, lo que se solucionaría con un envío certificado que aumentaría los costes para el cliente, y de que va a ser respetada su opción de no consentir el tratamiento de sus datos personales",añade la nota.

Según la CAVE, Telefónica ha buscado una "adaptación magistral" de los hechos encaminada a reducir al máximo el número de abonados que desautoricen a la compañía a manipular sus datos privados.