En la conferencia inaugural del nuevo ciclo "La educación que queremos", organizado por la Fundación Santillana, Cebrián aseguó que los españoles que hicieron la transición son "fruto de un deseo profundo, vital y recurrente por encontrar ámbitos de tolerancia y por desterrar el fanatismo en que nos intentaron educar".

A su juicio, estos ciudadanos antepusieron el diálogo y la discrepancia preservando la libertad de expresión. "Nuestra capacidad de asombro y nuestros deseos de tolerancia constituyen la médula del comportamiento de lo que bien podríamos llamar hoy la generación del Rey", señaló.

En su conferencia, titulaa "De súbdito español a ciudadano europeo", Cebrián dijo que la metamorfosis de los españoles del franquismo comenzó por la universidad y las playas, ya que el turismo y el desarrollo económico contribuyeron a que en la década de los 60 los deseos de reconciliación civil se hicieran cada vez más patentes.

Cebrián lamentó que ahora exista un "fundamentalismo democrático", protagonizado por quienes creen que hay "una democracia pura, auténtica, total y perfecta".

"Una especie de totalitarismo democático del que los infieles serán expulsados en nombre de la verdad y de la lucha contra el pagano", precisó.