Según informó Cepsa, se trata de un proyecto por el que diez personas con discapacidad se incorporarán durante tres meses a la compañía para formarse en sus oficinas de Madrid, y posteriormente podrán optar a las vacantes que pudieran surgir en la compañía.

A través de esta iniciativa, los aspirantes serán formados en habilidades y conocimientos que les permitirán afrontar con garantías los retos del mercado laboral, con el apoyo de los empleados de la compañía.

La Fundación Randstad será la encargada del reclutamiento de los participantes, que contarán con una dotación económica durante el proceso formativo y deberán contar con el certificado de discapacidad igual o superior al 33%, estudios de Formación Profesional de diferentes ramas, como por ejemplo administración y finanzas, actividades comerciales, gestión administrativa, relaciones laborales o asistencia a la dirección) o experiencia convalidable.

Asimismo, se valorará que sean personas dinámicas, acostumbradas a trabajar en equipo, con motivación por el aprendizaje continuo y actitud positiva.

Este programa supone un paso más en las políticas de diversidad e inclusión de la compañía energética que apuesta por un entorno inclusivo, la corresponsabilización del empleado y la inclusión real de personas con discapacidad en su plantilla.

Dentro de su compromiso con la diversidad e inclusión, Cepsa se ha fijado como objetivo para 2025 contar con un 2% de profesionales con discapacidad en su plantilla y un 1% en sus empresas colaboradoras.