Esta convocatoria llega días después de la celebración de la segunda reunión entre empresa y sindicatos, en la que la multinacional textil planteó la homogenización de las condiciones de la empresa en todo el país, que, ante la falta de de un convenio estatal, depende actualmente de los convenios provinciales.

Concretamente, CCOO apuntó que la empresa se abre a definir unos “mínimos garantizados de salario fijo anual, complementando las retribuciones establecidas por convenio hasta alcanzar dichos mínimos”, que detallarán en la próxima reunión del 9 de febrero.

Además, en la última reunión, los sindicatos afirmaron que la empresa está dispuesta a implementar diferentes ayudas a los trabajadores de tienda entre las que se encuentran un pago de 450 euros por nacimiento de un hijo, hasta 150 euros al mes para guardería cuando no sea gratuita, 200 euros al año para material escolar, hasta 500 euros para la universidad y 600 euros para la adopción internacional. UGT calificó este compromiso como la “nota positiva” de la segunda reunión, pues se equipara la situación a la de otros sectores del grupo como fábricas y logística.

De hecho, estas ayudas fueron uno de los motivos además de la subida salarial que esgrimió la Confederación Intersindical Galega (CIG) para convocar protestas y huelgas en A Coruña que acabaron desembocando en un acuerdo de la empresa para incrementar su salario.

Poco después del acuerdo, CGT, sindicato mayoritario en Madrid en las tiendas de Zara, Lefties y Pull&Bear, llamó a una huelga en Madrid para el 7 de enero, que CCOO y UGT, sindicatos mayoritarios a nivel estatal, no apoyaron, al tiempo que convocaron la Mesa estatal de Retribuciones.

Por ello, el sindicato convocante criticó que UGT y CCOO son “cómplices” de la situación actual en la empresa marcada “por la precariedad y las malas condiciones laborales” al iniciar la negociación “con unas condiciones muy alejadas de las solicitadas, con tan solo un 3% de incremento salarial, cuando lo que se pide es un aumento del 25%”.

CGT se refiere al compromiso acordado por Inditex en la primera reunión de la mesa, que realizará un anticipo a cuenta del 3% en provincias con convenios bloqueados. En esta reunión, también se acordó la renovación para 2024 del incentivo de 1.000 euros para dependientas (600 euros en el caso de jornadas de menos de 24 horas semanales) logrado en el acuerdo del pasado mes de noviembre.

Así, CGT reclama para todos los trabajadores de tienda de Inditex una subida salarial de 500 euros para aquellas personas que trabajan de 15 hasta 40 horas semanales y una subida de 250 euros para las que tienen un contrato inferior a 15 horas semanales, así como la equiparación salarial entre domingos y festivos y las ayudas sociales con otros sectores del grupo, algo que los sindicatos mayoritarios ya han reivindicado como logro conseguido durante las negociaciones.