Este desfase positivo a favor del cine español tiene su explicación en la tardía aplicación de la informática a los procesos de recuento de recaudaciones en taquilla y del número de espectadores que acuden a las salas españolas.

Según los datos recogidos en el boletín informativo del ICAA correspondiente al año 1995, la recaudación total entre 1981 y 1995 fue de 462.000 millones de pesetas. Sin embargo, en el boletín de 1996, dado a conocr hace pocas semanas, esta cifra se eleva por encima de los 484.000 millones de pesetas.

El Ministerio de Educación y Cultura achaca esta diferencia en los datos a la aparición de partes atrasados. "Este retraso se produce por la dificultad de codificar títulos no correctos, la demora del exhibidor en la entrada de partes, errores de codificación y al gran número de documentos que se manejan", según el ICAA.

La aparición de las nuevas cifras supone un aumento global de la recaudación en un 5 por iento, lo que podría provocar que distintos productores exijan en algunos casos el incremento proporcional de aquellas subvenciones recibidas que estuvieron condicionadas al rendimiento de sus películas en taquilla.