Es un aumento ligeramente inferior al registrado en julio, que se situó en el 29% en tasa anual. La desaceleración fue debida sobre todo al canal no presencial.

El avance del gasto se moderó durante la primera quincena de agosto debido fundamentalmente a la ralentización de las compras con tarjetas extranjeras. En la segunda, el repunte de las transacciones no presenciales, tanto con tarjetas españolas como extranjeras, compensó el menor incremento de las presenciales.

Las compras con tarjeta fueron un 71% mayores que las realizadas en agosto de 2019. Tanto las presenciales como las no presenciales superaron los niveles prepandemia, en línea con lo sucedido desde marzo.

El aumento de las compras con tarjeta este agosto se moderó en los sectores asociados al turismo y el entretenimiento, como viajes, alojamiento, transporte, restauración y, en menor medida, ocio y deportes. Por el contrario, el gasto en productos de primera necesidad, artículos de equipo personal y equipamiento del hogar cobró impulso.

El gasto presencial con tarjeta aumentó en todas las provincias en agosto, sobre todo en los destinos turísticos tradicionales, como los archipiélagos, algunos de interior, como Madrid y Toledo, y en País Vasco y Navarra. Con todo, el avance del consumo presencial se ralentizó en dos terceras partes de los territorios.