En declaraciones a la Cadena COPE, Rodríguez explicó que "es muy difícil que esto se resuelva militarmente, porque es una espiral de violencia que no tiene fin".

"Desde el año 2001 hemos tenido más de veinte contactos en la selva con la guerrilla, hacer de puente entre el ejército y la guerrilla para negociar la paz. Pero ha sido arriesgado. El ejército nos ha atacado en tres ocasiones. Yo mismo fui herido, nos trataron como bestias y nos tuviero retenidos a tres sacerdotes. A pesar de todo decimos que hay que seguir adelante", se lamentó el misionero.

En su opinión, si la comunidad internacional no se involucra de "forma seria", va a ser imposible que este conflicto se acabe. "En este sentido, hay un millón y medio de personas desplazadas, y deben ser las Naciones Unidas las que vengan y las que garanticen la seguridad de la población", aseguró Rodríguez.

Asimismo, subrayó que "con este juego de intereses quienes pagan las consecuenciases la población civil, porque esta guerrilla llamada Ejército de Liberación del Señor, la única manera que tiene de reclutar guerrilleros es recurrir al secuestro de niños".