Según una nota emitida esta mañana por la Oficina de Prensa del Congreso, la medida se justifica "ante la acumulación de representantes de los medios de comunicación en los pasillos del palacio del Congreso los días de sesión plenaria y ante la imposiblidad del desarrollo normal del trabajo de los profesionales de los medios de comunicación".

La nota consta de cuatro puntos, el primero de los cuales hace referencia a que los pasillos del Congreso "deberán permanecer libres para la circulación de diputados, funcionarios y periodistas".

"Los periodistas", señala el segundo punto, "se abstendrán de solicitar declaraciones públicas en los pasillos"; y en el tercero: "Las declaraciones se realizarán en el escritorio adjunto del pasillo, habilitado on megafonía y espacio suficiente para albergar a los representantes de los medios".

"En ningún caso", afirma el cuarto punto, "podrán permanecer en los pasillos personas con cámaras de televisión, cámaras fotográficas o magnetofones".

La nota concluye con una llamada a los periodistas que cubren información parlamentaria, para que colaboren con las medidas que entran en vigor hoy.

LA "M-30"

Desde hace varios meses, políticos y funcionarios se han quejado reiteradamente de que, en los díasen que hay pleno, el pasillo del hemiciclo es "intransitable". Incluso, en círculos políticos y periodísticos habituales de la casa se habla de "M-30" (en alusión a la autopista de circunvalación a Madrid), para referirse al pasillo principal del edificio "viejo".

El Palacio de la Carrera de San Jerónimo consta de dos edificios, el "viejo" hemiciclo (con los leones en la fachada) y su "ampliación", comunicados ambos por un pasillo elevado.

Habitualmente, periodistas, cámaras y fotógrafos desarrolan su labor en la "ampliación", en donde existen una sala de prensa y una sala de comisiones parlamentarias que alberga la mayoría de las ruedas de prensa.

Los días en que hay pleno, la atención informativa se traslada al hemiciclo (salón de plenos). Es entonces cuando periodistas, cámaras de TV y fotógrafos se agolpan en los escasos metros cuadrados que existen entre la puerta exterior del edificio y la puerta del salón de plenos, originando frecuentemente tumultos e impidiendo el paso a funcionariosy políticos.

Esta situación quedó patente durante el pleno sobre la droga, celebrado ayer.

La gran cantidad de informadores presentes, más de medio centenar, que esperaban al dirigente del PP, Rodolfo Martín Villa, en quien estaba centrada la atención por el "Caso Hormaechea", hizo que cuando este llegó se organizase una aglomeración que taponó el pasillo, hasta el punto que tuvo que repetir por dos vsces su intervención; una, en el tumulto, y otra vez en el "escritorio" que ahora el Congreso ha ijado como lugar obligado de encuentros con la prensa.