El Consejo de la Mujer está "muy preocupado por la visión del Corán que mantienen los grupos extremistas que defienden la prohibición del derecho de la mujer al trabajo y a la educación así como todas aquellas normas dirigidas a eprimir el papel de la mujer en la sociedad".

En su opinión, estas medidas atentan contra los derechos humanos en general, las libertades individuales y los compromisos adquiridos por los gobiernos del mundo en la IV Conferencia Internacional de la Mujer, celebrada en Pekín.

Por todo ello, el Consejo pedirá al Ministerio de Asuntos Exteriores que se pronuncie oficialmente en este sentido y realice cuantas gestiones diplomáticas sean necesarias "para promover un cambio de actitud en aquellos gobienos que, persiguiendo una 'islamización completa de la sociedad' condenan a las mujeres a estar ausentes de la sociedad".