Se trata de una instrucción técnica complementaria a la vigente autorización de explotación de la central, para que implante un sistema de purga y aporte del circuito primario (conocido técnicamente como "feed and bleed").

Conforme a la instrucción aprobada, el titular de la central deberá presentar al CSN un Plan de proyecto de la modificación de diseño, en el plazo de nueve meses.

Dicho plan tiene que "evitar con alta fiabilidad secuencias de sobrepresión en el primario que pudieran dar lugar a fallo de vasija".

La modificación tiene por objeto reforzar la seguridad de la central frente a eventuales accidentes severos (aquellos que van más allá de los accidentes contemplados en las bases de diseño), tomando en consideración las recomendaciones de las guías sobre accidentes severos emitidas en su día por la autoridad reguladora alemana para las centrales de diseño alemán, así como las prácticas recomendadas por la Asociación de Reguladores Nucleares Europeos (Wenra).