Clima

La construcción mundial duplicará su huella de carbono en 2050, según un estudio

- Hoy se celebra el Día Mundial de las Ciudades

MADRID
SERVIMEDIA

La huella de carbono del sector de la construcción mundial está en camino de duplicarse para 2050, lo que amenaza con descarrilar los esfuerzos para cumplir los objetivos climáticos del Acuerdo de París, que fue adoptado en diciembre de 2015.

Así se recoge en un estudio realizado por investigadores pertenecientes a instituciones de Alemania, China, Luxemburgo y Países Bajos, y publicado en la revista ‘Communications Earth & Environment’. El trabajo fue dado a conocer coincidiendo con el Día Mundial de las Ciudades, que se celebra este viernes.

En 2022, más del 55% de las emisiones de carbono de la industria de la construcción provinieron de materiales cementosos, ladrillos y metales, mientras que el vidrio, los plásticos, los productos químicos y los materiales de base biológica contribuyeron con un 6%, y el 37% restante procedió del transporte, los servicios, la maquinaria y las actividades en el sitio.

“El sector de la construcción ahora genera un tercio de las emisiones globales de CO2, frente a alrededor de un 20% en 1995. Si las tendencias actuales continúan, el sector puede superar el presupuesto de carbono de 2 °C como muy pronto en 2040”, según Chaouhi Li, de la Universidad de Pekín (China).

PAÍSES EN DESARROLLO

Los investigadores proyectaron diferentes escenarios de emisiones futuras de gases que calientan el planeta basándose en datos históricos. En el escenario sin cambios, la huella de carbono del sector de la construcción por sí sola superará el presupuesto anual de carbono para los objetivos de no superar en las próximas dos décadas un calentamiento global de 1,5 °C y 2 °C con respecto a la era preindustrial (recogidos en el Acuerdo de París).

“Entre 2023 y 2050, se prevé que las emisiones acumuladas relacionadas con la construcción alcancen las 440 gigatoneladas de CO2. Esto es suficiente para consumir todo el presupuesto de carbono global restante para alcanzar los 1,5 °C”, explica Prajal Pradhan, de la Universidad de Groningen (Países Bajos).

El estudio muestra un cambio significativo en las emisiones de las regiones ricas a las zonas en desarrollo. En 1995, los países de altos ingresos generaban la mitad de las emisiones del sector de la construcción. Para 2022, estas se habían estabilizado en gran medida, mientras que el crecimiento en las naciones en desarrollo dependía cada vez más de materiales con alto contenido de carbono, como el acero y el cemento.

Al mismo tiempo, el uso de materiales de origen biológico, como la madera, ha disminuido, lo que pone de manifiesto una oportunidad perdida para alternativas bajas en carbono.

‘REVOLUCIÓN DE LOS MATERIALES’

Los autores del estudio abogan por una ‘revolución de los materiales’ global, esto es, un cambio que suponga abandonar los materiales de construcción con altas emisiones de carbono y orientarse hacia alternativas bajas en carbono, circulares y de base biológica, como la madera de ingeniería, el bambú y los compuestos reciclados.

Su análisis muestra que los materiales cementosos, los ladrillos y los metales representan actualmente más de la mitad de las emisiones del sector, lo que subraya la necesidad de reinventar la forma en que se construye en el mundo.

“Los retos y las soluciones para la descarbonización de la construcción no son uniformes en el mundo. Para lograr cambios a escala de toda la cadena de suministro, se requieren en última instancia cambios estructurales en cuanto a los materiales, reduciendo la dependencia de materiales tradicionales como el cemento, el acero y los ladrillos, al tiempo que se exploran nuevas alternativas”, explica Jürgen Kropp, del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático (Alemania).

Además, el estudio señala que los países ricos deberían liderar este ámbito a través de la innovación, el diseño circular y una regulación más estricta, mientras que las regiones en desarrollo, donde se producirá la mayor parte de la nueva construcción, necesitan apoyo financiero y tecnológico específico para dar un salto directo hacia prácticas de construcción sostenibles.

Sin una transformación sustancial de este tipo, advierte el estudio, el sector de la construcción por sí solo podría consumir la totalidad del presupuesto de carbono restante para alcanzar el objetivo de 1,5 °C en las próximas dos décadas.

“La humanidad se ha acorralado a sí misma con acero y cemento. Para alcanzar los objetivos de París, debemos reinventar los materiales que dan forma a nuestras ciudades. Una revolución global de los materiales, basada en la circularidad, la innovación y la cooperación, puede transformar el sector de la construcción, de un problema climático, en un pilar fundamental de un futuro sostenible y resiliente”, concluye Hans Joachim Schellnhuber, director general del IIASA (Instituto Internacional de Análisis y Sistemas Aplicados).

(SERVIMEDIA)
31 Oct 2025
MGR/gja