Según informó este lunes el Instituto Armado, durante la investigación, en la que ha colaborado Europol y el Arma de Carabinieri italiana, se han intervenido unos 120.000 botes de conserva de atún y 45.000 litros de aceite.

En el registro efectuado en una de las sedes de la empresa, los agentes hallaron una zona clandestina de trabajo carente de las mínimas medidas de higiene, dos recipientes de grandes dimensiones con agua caliente, conteniendo en su interior numerosos tarros de atún devueltos por los compradores.

La investigación estima que la actividad de este entramado criminal alcanza varios años, para lo que se utilizaron materias primas de precio y calidad notablemente inferior al indicado su etiquetado, consiguiendo con ello rebajar los costes de producción y aumentar de manera exponencial sus ganancias.

VENTA EN ESPAÑA Y EUROPA

Se inició a finales de agosto del presente año tras una denuncia inicial, en la que se deducían las diversas irregularidades que estaría llevando a cabo una empresa afincada en La Rioja Baja. Esta sociedad se dedicaba a la elaboración y comercialización de productos alimenticios, principalmente conservas vegetales y de pescado, que eran distribuidos en España y otros países extranjeros, especialmente Italia.

Los agentes también han bloqueado un total de 21 cuentas bancarias, además de señalar la prohibición de enajenación de dos turismos de alta gama, una furgoneta y un camión frigorífico propiedad de la empresa afectada.

Los detenidos, con edades entre los 28 y 64 años, son investigados por delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública y estafa.

La operación ha sido llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil en La Rioja, que ha contado, en el ámbito internacional, con la cooperación de Europol y el Arma de Carabinieri italiana.