En declaraciones a Onda Cero, Cuevas señaló: "A mi me importa más entender al que está gobernando y comprenderle y saber qué es lo que quiere hacer y qué política económica y programa económico quiere desarrollar, que al señor que hay expectativas de que va a gobernar, pero no está gobernando".

"El señor Aznar", explicó, "en líneas generales sabemos lo que quiere hacer. Puede haber duas de cómo lo puede hacer y de cuando lo puede hacer, pero a mi me preocupa en 1995 más lo que hagan o lo que hayan impulsado en 1994 don Felipe González y el señor Pujol".

El presidente de la CEOE reiteró que la situación política es "insostenible" y que son necesarias fórmulas políticas para dar respuesta a los problemas que crean incertidumbre. "No vamos a decir cuales, eso es responsabilidad de los líderes políticos. Ahora, sí les decimos una cosa: las que se han ensayado durante 1994 no han dado esultado", indicó.

Añadió que "no sé si la solución pasa por unas elecciones generales ya, ni lo voy a decir, porque ésa no será mi responsabilidad. Los empresarios dicen que la alternativa es que tengamos en los próximos diez o doce meses tres elecciones y, su punto de vista es que la mejor manera de que esto no incida gravemente en la economía es que en vez de tres elecciones hubiera una".

"El señor González", continuó, "me decía el otro día: 'he reflexionado muchísimo sobre si debía o no debíahacer elecciones anticipadas y he llegado a la conclusión de que hacer en este momento elecciones anticipadas puede producir más problemas que arreglar situadiones'. Es un análisis muy importante porque el que tiene que decidir es él. Ahora, le aseguro que no es ésa la opinión de una gran mayoría de los ciudadanos españoles".

En cuanto a los Presupuestos del Estado de este año, Cuevas dijo que "ya han fracasado", como lo demuestra, a su juicio, el hecho de que a principios de año el Banco de España suiera los tipos de interés y de que ya han tenido que ser modificados.

También se refirió a la evolución de la inversión extranjera y dijo que "los inversores extranjeros no se van a marchar de España porque el mercado sigue siendo importante para ellos y porque, además, la economía española, salvando estas situaciones, tiene un potencial muchísimo más alto que otros países".

"Lo que sucede", explicó, "es que éste es el momento, 1995, en el que los empresarios españoles y de otros países tienen qu tomar decisiones estratégicas muy importantes, de nuevas inversiones, porque se ha salido de una crisis y hay que prepararse. Y ahí es donde se está produciendo la paralización".