La patronal expresa su preocupación por el repunte del IPC en los últimos meses y analiza las causas, que, en su opinión, son estructurales y coyunturales y también derivadas de insuficiencias metodológicas del IPC, que impiden que este índice recoja con rapidez los cambios que se producen en los hábitos de los consumidores y provoca problemas para hacer unseguimiento de los precios de productos complejos como el teléfono y turismo.

Entre las causas coyunturales, destaca las rigideces que persisten en determinados mercados y la insuficiente dotación de infraestructuras que tiene España. La organización que dirige José María Cuevas reconoce que en 1999 continúa la senda de desaceleración salarial, aunque advierte del riesgo de que el repunte de la inflación modifique las expectativas de los agentes económicos y se termine trasladando a la negociación colctiva.

Como causas coyunturales del aumento de los precios, el documento de la CEOE, que fue aprobado en la última junta directiva, señala la subida de los precios de las materias primas energéticas en los mercados internacionales y la evolución menos favorable de los precios de los productos alimenticios.

Para la CEOE, es necesario acometer reformas estructurales para controlar el IPC. En concreto, cree que el Gobierno debe continuar con la reforma del sector público y la reducción del gasto púbico, cerrando el proceso de privatizaciones y replanteándose la presencia del Estado en sectores tales como astilleros, transporte, televisión o defensa.

La patronal propone también una modificación del actual modelo de planes de pensiones haciendo su regulación más atractiva e incentivadora, y una mejor gestión de la asitencia sanitaria coordinando los recursos públicos y privados existentes; y aprovecha también para pedir una reducción progresiva de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Socil.

SUELO, ALQUILERES Y LIBROS

Según la CEOE, es necesario, además, modernizar y liberalizar mercados, como el laboral. La patronal rechaza mayores costes en la contratación, sea fija o temporal, y pide se sigan reduciendo los costes del despido y que los crecimientos salariales vayan ligados a la evolución de la productividad. También aboga por la descentralización de la negociación colectiva.

Otros mercados que deben ser liberalizados para controlar la inflación son los del suelo, los alquilers, los libros, el correo, el gas y la distribución comercial, en opinión de la CEOE, que también pide mayores incentivos fiscales a las inversiones en I+D y a la internacionalización de las empresas.

Para la CEOE, también deben adoptarse medidas a corto plazo tendentes a moderar el crecimiento de la demanda, como una reducción adicional de los gastos del conjunto de las Administraciones Públicas centrada en el gasto corriente; incentivos al ahorro a largo plazo, y la supresión del impuesto de matriculción. Asegura que esta última podría disminuir el IPC entre dos y tres décimas.

En relación con la metodología del IPC, la organización que preside Cuevas propone al Gobierno que aproveche la renovación de la base del IPC para el año 2000 para introducir cambios, como acortar los períodos del cambio de base a cinco o menos años y cambiar la fórmula de cálculo para introducir modificaciones periódicas en las ponderaciones.

CEOE cree que la puesta en marcha de estas medidas debe hacerse "de manera ransparente y programada", de tal forma que los sectores implicados sean escuchados y tengan tiempo para adaptarse a estas medidas de la forma más eficiente, evitando la aprobación de medidas aisladas como las adoptadas recientemente por el Gobierno para controlar el IPC.