Tan sólo dos monitores de televisión parecen haber sido sustraídos o al menos cambiados de sitio en el recinto del centro de prensa.

El exterior del Palacio Muniipal de Congresos donde se reunen mandatarios de más de 30 países está vigilado por 200 agentes permanentemente. La ausencia de incidentes durante la primera jornada de trabajo ha hecho de la meteorología el principal protagonista, obligando a tomar a los agentes medidas especiales para combatir el frío.

En las esquinas, en cada acceso al recinto, varios agentes de policía vigilan el buen desarrollo del Consejo Europeo. Para combatir las bajas temperaturas y la intensa nevada que ha caído hoy sobre lacapital de España, los agentes, que van bien pertrechados, hacen guardias a la intemperie de no más de dos horas.

Cada funcionario lleva camiseta, camisa, un chaleco guateado y anorak impermeable con capucha que cubre el pasamontañas y la gorra que completan el uniforme. Además, calcetines de lana virgen y las botas reglamentarias consituyen toda la impedimenta para aguantar las vigilancias en la calle.

Según los propios agentes, el frío "se lleva bien", pero la lluvia o la nieve "son más incómods". El recinto estará vigilado día y noche mientras dure la Cumbre.