Los problemas de liquidez a corto plazo de la matriz holandesa que han provocado la suspensión de pagos no afectan a la filial española, al menos por ahora, ya que dispone del suficiente stock de vehículos y recambios para atender el mercado español. Las citadas fuentes eñalaron como prueba que se han cobrado los salarios sin problemas.

El portavoz de la compañía no aportó datos sobre la cuenta de resultados de la filial española en 1992, "ya que es política de la empresa hacerlo de una forma consolidada".

Sin embargo, confirmó que 1992 "ha sido un año dificil para todo el sector de vehículos industriales" por el sensible descenso de las ventas. En este sentido, confirmó a Servimedia que, aunque no se dispone de la cifra exacta, es previsible que se produzca unareducción de las ventas sobre los 16.000 millones que DAF España facturó en 1991.

DAF España ostenta una cuota de mercado en torno al 6 por cien, que se amplía al 8 por cien para el conjunto de Europa considerando todo el grupo.

La suspensión de pagos de la matriz holandesa se ha producido como consecuencioa de una falta de acuerdo entre los acreedores, especialmente un grupo de bancos, a los que se había solicitado una inyección de fondos a corto plazo.

DAF suspendió ayer su cotización en Blsa de Amsterdam y existían rumores sobre un plan de reestructuración que comportaría incluso la segregación de algunas empresas para su posterior venta.