Así lo dijo en la rueda de prensa para explicar los resultados obtenidos por Bankinter en 2023 y en la que estuvo por última vez como consejera delegada.

Dancausa se refirió al cambio de poderes en la cúpula del banco que supondrá que ella pasará a ser presidenta no ejecutiva, en el lugar de Pedro Guerrero, que se jubila, y Gloria Ortiz pasará de ser directora de banca comercial a consejera delegada ejecutiva.

Dancausa defendió el modelo del banco señalando que es “conforme a nuestras políticas internas de sucesión en las cuales la comisión de nombramientos evalúa la idoneidad de los candidatos” sin la participación de las implicadas. “Estas políticas tratan de garantizar la estabilidad, que haya una tranquilidad en el banco”, agregó, y recordó que la presidencia de Bankinter es no ejecutiva desde 2013. “No sé si el BCE prefiere a personas independientes que a ejecutivas como yo que pasan al otro rol, pero esta es una decisión que tiene que tomar el consejo del banco y que además ellos conocen”, añadió. Además, contestó que el BCE no ha “sugerido” un externo para la presidencia “en ningún momento” y que había más candidatos además de ella.

La consejera delegada confesó tener “fuerzas” para haber seguido en ese puesto, aunque acto seguido destacó que ya es la más mayor de todos los consejeros delegados y que “el banco necesita un recambio claramente” porque “13 años son muchos años para un consejero delegado”. “Creo que hace falta gente nueva, una nueva generación, ideas nuevas”, apuntó. “Quiero a Bankinter como si fuera mío, estoy encantada con este camino”, afirmó.

Sobre Gloria Ortiz, dijo tener “claro” que todos los poderes ejecutivos van a recaer sobre ella y que su papel como presidenta será “más institucional”. Prometió “nuevos cotas de éxito” para el banco en la etapa de Ortiz y la definió como una persona “con un excepcional conocimiento del banco” y “sobradamente preparada”.

Dancausa quiso despedirse en esta última rueda de prensa para ella destacando que desde que llegó al cargo de consejera delegada en 2010, “en plena crisis financiera”, el banco ha dado beneficios todos los años y tan solo en 2012 y 2020 ha logrado unas ganancias inferiores a las del año anterior por los decretos de provisiones por la crisis financiera en el primer caso y la pandemia en el segundo. De hecho, el banco obtuvo en 2023 un beneficio récord de 845 millones de euros si no se tiene en cuenta la plusvalía por la escisión de Línea Directa de 2021. Sobre eso, Dancausa insistió en que no todo se debe al impacto positivo de los tipos de interés, sino también a “los frutos de las inversiones que hemos hecho en el pasado”. De hecho, el banco asegura que los resultados obtenidos son “sostenibles” en el tiempo.

“Me voy con la satisfacción del deber cumplido, el bando que dejo hoy es un banco más sólido, más robusto, de mayor ambición, de mayor dimensión”, confesó, y en el plano personal también dijo estar muy satisfecha por “haber defendido el sector allá a donde he ido”.

Sí que señaló que mejorar la reputación del sector sigue siendo una asignatura pendiente. Reconoció que “nos equivocamos también tanto” durante la crisis financiera y “va a costar recuperarlo”. “Sí quiero pensar que Bankinter tiene una buena reputación como banco, no por mí, sino por todos los empleados”, comentó, y que la sociedad “nos tiene que ver como aliados”.