Según informó la Policía este martes, la investigación comenzó a principios del año pasado, cuando se tuvo conocimiento de la existencia en la capital de España de un clan familiar que estaría tratando de introducir billetes falsos dentro del curso legal a través de la compra de diferentes productos.

Los implicados trataban de comprar todo tipo de artículos como medicamentos, bebidas, ropa, gasolina o comida como pizzas y pollos asados. Después de adquirir los productos, huían en un vehículo alquilado.

Con el objetivo de dificultar la labor policial, los detenidos compraban tanto en pequeños comercios como en grandes superficies. En algunas ocasiones, entraban en el mismo local hasta tres veces e incluso llegaban a utilizar a un menor al que le entregaban billetes falsos para que comprase diferentes productos.

Otras veces, fingían que no se conocían entre ellos, aprovechaban para introducir en su bolso todo tipo de productos.

INVESTIGACIÓN PARALELA

Una vez identificados por la Policía, se estableció un operativo policial en el mes de marzo para la localización y detención de las dos personas como presuntas responsables de los delitos de falsificación de moneda y hurto.

De forma paralela, una investigación iniciada en diciembre finalizó con la detención de dos personas que también trataban de introducir billetes falsos en el curso legal mediante la compra de productos publicitados en plataformas informáticas.

Para ocultar su identidad, usaban un perfil ficticio, a través del cual contactaban con otros usuarios para decirles que estaban interesados en sus anuncios.

Llegaron a presentarse en el domicilio de alguno de estos usuarios solo para comprar una consola con ese dinero falso y que, posteriormente, publicitaron en su perfil ficticio.