Según informó este viernes la Policía, los arrestados se encontraban en un avanzado estado de radicalización y consumían y difundían de forma selectiva contenido multimedia afín a la organización terrorista Daesh.

La investigación, que se inició hace un año y medio, permitió constatar la peligrosidad de los detenidos, quienes mantenían relaciones con la delincuencia común y el tráfico de drogas, lo que les facilitaba el acceso a armas en el mercado negro.

La operación se desarrolló de forma simultánea este martes con dos registros donde se intervino abundante material electrónico y documentación que está siendo analizada por especialistas.

Las detenciones fueron realizadas por agentes de la Comisaría General de Información, con la colaboración de las Brigadas Provinciales de Información de Tarragona y Zaragoza, el Centro Nacional de Inteligencia y el FBI estadounidenses.

La operación fue dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número Uno y la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que decretó el ingreso en prisión de uno de los detenidos y la libertad con medidas cautelares para el otro.