Durante la operación, llevada a cabo en el distrito madrileño de San Blas, se han intervenido 11 kilos de cocaína, una pistola simulada, un revólver detonador, más de 10.745 euros y otros efectos, además de diversa documentación.

Según informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid, los agentes de la Comisaría de San Blas-Vicálvaro iniciaron una investigación tras detectar la presencia de traficantes de drogas en el distrito.

Las primeras gestiones apuntaban a que se alojaban en una zona de apartahoteles de alquiler, lo que les permitía cambiar de domicilio sin tener que salir de la urbanización, y a que utilizaban las viviendas como laboratorios clandestinos de droga.

El dispositivo de vigilancia establecido por la policía permitió detectar a Diego Felipe G., que al percatarse de la presencia policial mostró evidentes síntomas de nerviosismo. En el registro, los agentes le intervinieron una bolsa con 11 kilos de cocaína, distribuida en 10 paquetes rectangulares, prensados, embalados y precintados con plástico, y unas llaves.

Estas llaves no pertenecían a su vivienda, sino a otra cercana en la que fue arrestada Lucero W.C. cuando se disponía a abandonarla. La detenida llevaba un revólver detonador, calibre 6 milímetros, cinco cartuchos percutidos y una caja con 64 proyectiles sin percutir, una pistola simulada calibre 9 parabéllum, un ordenador personal, algún reloj de caballero, varios recibos de pequeños envíos de dinero en fechas cercanas entre sí, 9.750 euros y otros efectos, que se investigan en la actualidad.

Diego Felipe G. ha estado detenido en dos ocasiones a causa de malos tratos en el ámbito familiar e infracción a la Ley de Extranjería, y Lucero W. ha estado detenida por estancia irregular y atentado a agente de la autoridad. Los dos han pasado a disposición judicial.