Así se expresó Díaz en una entrevista en la Cadena SER recogida por Servimedia al ser preguntada por sus discrepancias con Calviño y por si la echará de menos ahora que en pocas fechas dejará su cargo para ponerse al frente del Banco Europeo de Inversiones (BEI).

Sobre la última diferencia entre ambas, relativa a la reforma del subsidio por desempleo, Díaz dio a entender que principalmente se han podido imponer las tesis del Ministerio de Trabajo y se preguntó que hubiera pasado con esta ayuda sin Sumar en el Gobierno.

“Hoy los trabajadores y las trabajadoras tienen mejorado su subsidio, lo hemos ensanchado”, sostuvo Díaz, recordando que con esta reforma se aumenta la cuantía de la ayuda y se protege a más colectivos. Al hilo, indicó que no comparte que “recortando la protección social incentivemos la incorporación al mercado de trabajo” y defendió que sucede lo contrario.

En este punto, sacó pecho de las políticas sociales desplegadas desde el Gobierno de España y subrayó que, pese a situaciones como la pandemia, “tenemos los niveles de desigualdad más bajos” de los 10 últimos años.

“Estoy en el 5G, en el corazón económico del gobierno y Sumar sirve para esto, somos una fuerza laborista”, enfatizó la vicepresidenta segunda, quien dijo representar los intereses de los trabajadores. Pero, pese a las diferencias mostradas, comentó que tiene “mucho cariño” a Calviño y afirmó que es “un orgullo” que una española vaya a presidir el BEI.

IMPUESTOS

Por otra parte, la vicepresidenta segunda volvió a insistir en la necesidad de que se mantenga el impuesto especial a la banca y a las energéticas y proclamó que ello está “recogido de manera clara en el acuerdo de Gobierno” entre el PSOE y Sumar.

“Hay partes a veces en los acuerdos que firmamos que están redactados de forma ambigua, pero esa redacción que yo he leído el otro día desde Coruña es clarísima, y dice que lo revisaremos para mantener estos impuestos”, abundó.

Así, explicó que estos tributos están vigentes hasta finales de 2024 y que será entonces cuando habrá que revisarlos, pero para mantenerlos. En su opinión, revisar una norma que ya está en vigor hasta finales del año próximo “sería como una especie de dislate”.

Finalmente, incidió en que hay mucha gente que tiene dificultades para llegar a final de mes o para poner la calefacción y que hay sectores como las grandes energéticas y la banca que tienen “beneficios superlativos como nunca los han tenido”. “Por tanto, la democracia ha de llegar también aquí, a los ingresos públicos, ha de llegar a las empresas y ha de llegar en definitiva a la economía de un país, y los acuerdos hay que cumplirlos”, aseveró Díaz.