Díaz se expresó en estos términos durante la jornada ‘Metafuturo’ organizada por laSexta, en una mesa que compartió junto al exdiputado del PP José María Lassalle y que fue moderada por la periodista Ana Pastor.

“Es probable que en Norteamérica, dependiendo también de cada Estado, tengamos relaciones diferentes, pero el Derecho vale para estas cosas”, manifestó Díaz, quien puso en valor la apuesta por el “humanismo” que se realiza en España y en Europa frente a otros modelos del mercado de trabajo en lugares como China y Estados Unidos.

Asimismo, la vicepresidenta segunda sostuvo que es necesario “regular” las cuestiones relacionadas con los contenidos de las redes sociales “primando siempre la libertad de expresión” en un país democrático. “Creo, sinceramente, que Elon Musk no nos puede condicionar los debates en el mundo, de ninguna de las maneras. Tiene que tener un carácter democrático”, declaró Díaz, en referencia a la política del nuevo dueño de Twitter.

En este sentido, señaló que “tenemos que tener cierto grado de disposición sobre esto”, explicando que no son lo mismo las “noticias falsas” y las “falseadas”, porque estas segundas se difunden sin saber que no son ciertas. Por ello, apostó por una “reflexión” sobre “qué derechos tenemos en las redes sociales”, porque hay determinadas cuestiones que “no se pueden permitir”. Con todo, la titular de Trabajo reconoció que es una materia “hipersensible” y “muy delicada” que ha de ser abordada entre todos.

Más allá de las redes sociales, Díaz puso en valor la ‘Ley rider’ y la del trabajo a distancia, resaltando que la primera, sobre las plataformas digitales, fue “la más difícil” aunque acabó con acuerdo entre sindicatos, patronal y Gobierno. En este sentido, hizo hincapié en ensalzar el papel que en esa mesa jugaron los representantes empresariales.

ALGORITMOS

En cuanto a los algoritmos que cada vez más usan las empresas en diferentes procesos como la contratación de personal, la ministra dijo que le “gustaría” que los empleados “empiecen a hacer uso de sus derechos” y adopten acciones cuando crean que no se les ha respetado el “principio de no discriminación”. En este punto, citó como ejemplo que puede haber algoritmos que valoran más el trabajo que se hace a ciertas horas, penalizando a las mujeres, o que se perjudique a mayores de 45 años.

Asimismo, defendió que empresas y trabajadores tienen que “pactar el número de horas” en que se ha de estar “disponible” y “conectado”, porque “no se pueden enviar mails a las 23.00 horas salvo que estés en tiempo de trabajo nocturno”. Por ello, explicó que se va a avanzar en la regulación de la desconexión el próximo año, haciendo referencia a la Ley de usos del tiempo que la ministra ha señalado varias veces que quiere impulsar.

No obstante, animó a no tener “ningún temor” por el uso de lo digital, ya que lo que se debe hacer es regular esta realidad. Así, incidió en que España, cada vez más, es “un país digital”, y añadió que “la clave está en dotarlo de derechos” en este ámbito.

DESCONEXIÓN

Por su parte, José María Lasalle remarcó la importancia de reconocer por ley el derecho a la desconexión e instó a “concienciar a las empresas de que el bienestar” no solo está “en la cuenta de resultados o en la facturación”, al tiempo que indicó que “hacen falta políticas públicas que hagan posible una buena vida digital”.

También pidió garantizar que lo digital no genere “desigualdad” en el ámbito laboral y avisó de que el ser humano debe trabajar en conocimientos “que lo hagan insustituible” porque determinadas decisiones deben estar supervisadas y deben ser adoptadas en último término por las personas.

“El ser humano tiene la labor de sobrevolar todo lo que vamos a generar”, agregó Lassalle, quien, como Díaz, apostó también por regular los límites de los contenidos en las redes sociales para no dañar la “dignidad” de las personas.

Eso sí, pidió regular los algoritmos, ya que son los que muchas veces filtran o potencian contenidos. De hecho, advirtió de que “es más importante regular” algoritmos como los de Twitter que los contenidos, porque “ese algoritmo está desestabilizando las democracias”. Además, sostuvo que quien no desea que se regulen las redes sociales es porque “no tiene que estar teniendo la conciencia demasiado tranquila”.