Curiel llamó la atención sobre el "enorme alcance" que desde el punto de vista social tiene el debate sobre al televisión digital. "La televisión, tanto tradicional como digital, se ha convertido en un fenómeno cultural que no puee depender de intereses económicos privados y que en la sociedad moderna se ha convertido en un vehículo fundamental de acceso a la cultura, además de un medio de información veráz".

Encontró "lógico" que los poderes públicos estén "empeñados en la defensa del interés general para evitar que ese vehículo de difusión cultural dependa de intereses privados, que son muy respetables, pero no tienen que coincidir con los generales o con las obligaciones de los poderes públicos".

Curiel defendió la creción de una plataforma digital única en la que ningún grupo económico tenga una posición de hegemonía y que, por tanto, fuera punto de encuentro para todos los medios de información y se mostró partidario, asimismo, de la implantación de un descodificador único.