En declaraciones a Servimedia, un portavoz de la dirección de RTVM indicó que Sanz nunca ha llamado "acostistas" a los representantes de UGT en el ente y por lo tanto no tienen ningún sentido estos comentarios.

Según la hoja informativa ugetista, el problema que tiene RTVM no es ese, sino "otro más acuciante, que tiene nombre y apellidos: 80 trabajadores, con sus familias incluidas, a los que se les acaba su contrato el próximo mes de enero".

UGT se pregunta por las explicaciones qu Marcos Sanz va a dar a los trabajadores, "que ven cómo usted se dedica a perseguir 'fantasmas políticos', sin hacer nada para solucionar su situación".

Quizá, según el sindicato socialista, el director general también considera que estos trabajadores son "acostistas": seguidores de José Acosta, presidente de la Federación Socialista Madrileña (FSM) y cabeza visible de un sector del PSOE enfrentado políticamente al presidente de la CAM, Joaquín Leguina.

"UGT es un sindicato y no un partido polítio; o lo que es lo mismo, es una organización tan democrática que a sus afiliados no se les pide ninguna disciplina de partido", indican los representantes de la central.

Un portavoz de la dirección de RTVM explicó a Servimedia que los 80 trabajadores cuyo contrato termina en enero y que, según UGT, van a ser despedidos, habían firmado por un periodo de dos años, que ya ha concluido.

Al haberse cubierto estas plazas por libre designación, no tienen el mismo carácter que otros puestos de la Adminisración autonómica, y por lo tanto no les corresponden los derechos de antigüedad que reclama la central socialista para que pasen a fijos.