En declaraciones a Servimedia, Granados señaló que el artículo 35 de los Estatutos, que tipifica las formas de integración en Izquierda Unida, se refiere sólo a colectivos, partidos o personas a nivel individual que, desde fuera, quieren entrar en IU.

"En ningún momento se prevé la posibilidad de que una corriente de Izquierda Unida se transforme en partido dentro de IU", explicó.

Según Graados, la dirección está a la espera de que los renovadores le hagan llegar por escrito la fórmula que pretenden emplear para crear el partido, para que se pronuncie sobre ella el Consejo Político Federal.

Aseguró que el sector oficial no quiere poner ninguna traba a Nueva Izquierda, "pero sí queremos que se respeten unos estatutos que ha aprobado el conjunto de la organización de forma mayoritaria".

Desde el punto de vista político, Granados dijo que la transformación de Nueva Izquierda en partid será positiva, porque "les servirá para aclararse ellos mismos internamente y tener voces con las mismas intensidades".

A su juicio, ahora mismo se está dando demasiada importancia a Nueva Izquierda en los medios de comunicación si se tiene en cuenta su respaldo en Izquierda Unida. "El bombo y platillo que se les da no se corresponde con su representación", afirmó.