En rueda de prensa celebrada en Madrid tuvo lugar la presentación de la nueva vacuna bivalente de Pfizer, ‘Abrysvc’, que está indicada para la protección pasiva contra las enfermedades de las vías respiratorias inferiores (Ervbi), causadas por el VRS en lactantes desde el nacimiento hasta los seis meses de edad, mediante la inmunización de las mujeres durante el embarazo y también para la vacunación activa de las personas mayores de 60 años para la prevención de estas patologías.

Es la primera vacuna autorizada que se diseñó para la inmunización de embarazadas y ahora su uso ya está aprobado para administrar una sola dosis de la vacuna entre las semanas 24 y 36 de gestación. Además, se estudió en adultos mayores de 60 años y su autorización de comercialización incluyó el uso de una dosis única también en esta población.

Durante su intervención en rueda de prensa, la enfermera, matrona, miembro del grupo de ‘Educadores en vacunas’ y secretaria de la Asociación Nacional de Enfermería y Vacunas (Anenvac), Inmaculada Cuesta, explicó que “esta vacuna tiene capacidad para conferir una inmunidad a la madre que puede ser transferida al recién nacido”.

ANTICUERPOS PROTECTORES

“A medida que el sistema inmunológico de la gestante reacciona a la vacuna, se producen una serie de anticuerpos protectores contra el VRS. Una porción de estos anticuerpos se transmite al feto en desarrollo a través de la placenta, ofreciendo al bebé un escudo vital contra el VRS en los primeros seis meses de vida, precisamente cuando es más vulnerable”.

Asimismo, recordó que es importante que la mujer en edad fértil llegue al embarazo con todas las vacunas sistemáticas y recomendadas administradas: frente a dTpa (difteria, tétanos y tosferina) en cada embarazo, la gripe si la gestación coincide con la temporada estacional, la covid-19 y el VRS.

Por su parte, la pediatra en el Centro de Salud Nazaret (Valencia) y miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP), la doctora María Garcés Sánchez, puso de manifiesto que la bronquiolitis por VRS en el lactante es un cuadro muy frecuente y de especial gravedad en el lactante menor de 6 meses, dado que su sistema inmunológico es muy inmaduro para defenderse del virus y su aparato respiratorio es muy sensible a la enfermedad.

Además, la bronquiolitis en lactantes se asocia con un mayor riesgo de hiperreactividad bronquial (una especie de asma), en los cinco primeros años de vida.

INFECCIONES RESPIRATORIAS

La Organización Mundial de la Salud estima que el VRS representa más del 60% de las infecciones respiratorias agudas en lactantes y niños pequeños en todo el mundo.

De hecho, destacó la doctora Garcés, que “las infecciones por VRS son, además, la principal causa de hospitalización en lactantes5 y, en concreto, se estima que una de cada 10 hospitalizaciones en menores de cinco años es causada por el virus respiratorio sincitial. Además, no se disponía de ningún tratamiento específico para la bronquiolitis”.

Por tanto, añadió, “disponer de una vacuna para la gestante para la prevención del VRS es una buena estrategia para proteger al bebé y evitar secuelas posteriores, como ya se ha demostrado con otras vacunas como la de la tosferina, pues se trata de una manera natural de conseguir que la madre pase a través de la placenta los anticuerpos protectores a su hijo y se evita el pinchazo al niño”.

Al tratarse de un virus respiratorio, el VRS afecta a los adultos al igual que lo hacen la gripe, la neumonía o el SARS-Cov-2. A este respecto, el profesor de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, el doctor Ángel Gil, aseguró que “el problema es que pensamos que es una infección que solo afecta a niños pequeños y que apenas se diagnostica en adultos”.

De hecho, añadió, el VRS puede causar enfermedad grave en los adultos, particularmente en los mayores de 60 años, en adultos con cardiopatía crónica, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), asma o inmunocomprometidos, pero también en adultos mayores sanos. Además, en adultos de 60 años y mayores, hay más mortalidad intrahospitalaria relacionada con casos de VRS -8% de los casos- que con casos de gripe.