Salud

El dolor tratado de una forma incorrecta puede “aumentar la mortalidad posoperatoria en recién nacidos”, según expertos

- La evaluación de dolor es uno de los retos más importantes en niños que no pueden expresarse

Madrid
SERVIMEDIA

Expertos en dolor infantil debatieron sobre los últimos avances en este campo durante la sexta Jornada Nacional sobre Dolor Infantil. La principal conclusión es que “un dolor no tratado adecuadamente puede, en el caso de los recién nacidos, provocar un aumento de la mortalidad”, según destacó el doctor Francisco Reinoso-Barbero.

El jefe de Servicio de Anestesiología-Reanimación Infantil del Hospital Universitario La Paz de Madrid, Francisco Reinoso-Barbero, explicó que un dolor “no tratado adecuadamente, puede desencadenar unas consecuencias neuroendocrinas inmediatas de aumento de la morbilidad de los pacientes y; en el caso de los más pequeños, provocar un aumento de la mortalidad postoperatoria”. En el caso de pacientes recién nacidos en estado crítico que se someten a una cirugía cardíaca, un estudio reveló que el tratamiento del dolor ha influido en las muertes postoperatorias.

El principal reto que tienen los pacientes críticos “es que su dolor pase desapercibido o sea minusvalorado ante la importancia de los otros síntomas que ponen en peligro su vida”, según este especialista. Por ello, los coordinadores del evento, el doctor Reinoso-Barbero y el doctor Jordi Miró, director de la Cátedra de Dolor Infantil de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona, señalaron la importancia de un correcto abordaje del dolor infantil.

Según el doctor Jordi Miró, el problema al que se enfrentan los investigadores del dolor infantil sigue siendo la falta de recursos. “La formación de los profesionales, la investigación y la escasez de programas de tratamiento, muy evidentes en relación al dolor crónico”. Sobre el estudio del dolor infantil, afirmó que la cantidad de recursos que se están dedicando a la promoción de la investigación en dolor “no llega al 1%, y en muchas ocasiones, no supera el 0,2%, en los últimos cinco años”, indicó.

Respecto al soporte psicológico, el doctor Reinoso-Barbero defendió que la falta de analgesia adecuada se asocia a secuelas psiconeurológicas como el "síndrome de estrés postraumático o síndrome de estrés posuci": “Ambientes acogedores, la presencia de los padres durante el ingreso y manipulaciones diagnósticas, los juegos, o la musicoterapia favorecen que los pacientes infantiles disminuyan de un modo importante su ansiedad y la percepción del dolor ante situaciones potencialmente estresantes”.

La evaluación del dolor es uno de los retos más importantes en niños, un problema al que se añade, en algunos casos, la dificultad en la comunicación debido a diferentes trastornos. En estos casos, las familias tienen "un papel definitivo" en el abordaje del dolor crónico infantil, según los expertos, “sobre todo en los niños que no pueden expresarse y que tienen cambios de conducta asociados al dolor que solo los padres conocen y que sólo ellos pueden trasladar a los facultativos”.

Durante la Jornada, se anunció la comunicación ganadora del Premio Aseerdar-td al mejor póster enfocado en la atención al dolor en población infanto-juvenil con TEA, a cargo de Purificación Sotomayor, Javier Torres, María Dolores Cárceles del Grupo de Investigación en Dolor Navegar (Universidad de Huelva, Universidad de Murcia), que analiza el abordaje del dolor en menores con trastornos del espectro autista.

(SERVIMEDIA)
14 Jun 2022
CAG/gja