El acto, según avanza en una entrevista con Servimedia, consistirá en un diálogo de tres mujeres que hablarán de manera “intergeneracional de cómo es Madrid para nosotras”, sobre el modelo de ciudad o el futuro de la capital.

“Un espacio abierto en el que la gente nos pueda preguntar, porque creo que esa visión intergeneracional dice mucho también de la manera en la que yo enfoco la política, en la cual cualquiera me puede votar”, explica.

Porque, aclara, “uno piensa en unas siglas y unos posibles votantes” pero “mi candidatura la puede votar cualquier madrileño que busque un proyecto solvente, una persona que le genere confianza y una persona con la suficiente madurez y experiencia como para no solo resolver el problema del día a día, sino para transformar Madrid”, defiende la candidata socialista.

Maroto asegura que el suyo es un “proyecto renovado con las siglas del Partido Socialista”, un partido del que se siente “orgullosa”, pero apunta que “no me encasillo solo en no en ese militante simpatizante del Partido Socialista, porque creo que mi visión política es mucho más amplia y que puede hacer que muchas más” para que “vean en mí a una alcaldesa, una persona a la que se puede confiar con capacidad de gestión resolutiva”.

Precisamente, la ministra de Industria arremete contra la actuación del actual alcalde de Madrid y candidato del PP a la reelección, José Luis Martínez Almeida, porque “improvisan”. “No tienen un plan, de hecho no cuenta este año, ni siquiera con un presupuesto que responda a las necesidades que tiene la ciudad de Madrid, que van cambiando año a año”.

“Estas improvisaciones responden a la falta de proyecto político” por parte de Almeida y del PP por lo que “la gestión va a ser para mí fundamental”, asegura Maroto a Servimedia, como la base de un proyecto que también busca combatir las “desigualdades territoriales y sociales” y solucionar “el primer problema que los madrileños dicen que tienen sea el tráfico”.

CONFRONTACIÓN Y RUIDO

Además, denuncia que el PP en Madrid “utiliza la confrontación permanente con el Gobierno de España como una manera de hacer política” y para ella eso es una “equivocación” porque “las administraciones tenemos que trabajar juntas para resolver los problemas complejos que tiene la ciudad de Madrid”.

En esta línea, indica que los ciudadanos están “acostumbrados a una política de trincheras que no es la política que le gusta hacer a la candidata del Partido Socialista.

La todavía miembro del Gobierno que preside Pedro Sánchez reconoce que “el ruido no ayuda” y que es “es un elemento que genera confusión como un gobierno en determinadas cosas pueda discrepar, pero es verdad que somos un gobierno de coalición”.

Defiende la gestión al frente el Ejecutivo de coalición entre PSOE y Unidas Podemos porque “hecho grandes cosas como gobierno de coalición en momentos tan complejos como los que tenemos tenido que gestionar” y a ello le pondrán los españoles comuna nota “muy positiva”.

“Pero es verdad que yo, que soy una política de acuerdos y que me gusta practicar el acuerdo y el diálogo y que la confrontación se deje al lado, no me siento cómoda con que en el Gobierno de coalición se nos distinga más por lo que no estamos de acuerdo que por todos los acuerdos que cada martes llevamos al Consejo de Ministros”, concluye Maroto, una de las ministras que acompaña a Sánchez desde que llegó a La Moncloa en junio de 2018.