Clima

Los ecologistas tildan de “tibio” el objetivo de Bruselas de reducir un 90% las emisiones en 2040

- Greenpeace acusa a la Comisión Europea de “hacer trampas con los números”

- WWF cree que el uso de compensaciones en países extracomunitarios “debilita” la propuesta

- Climate Analytics afirma que la UE “abdica” de su liderazgo climático con un objetivo “plagado de lagunas”

MADRID
SERVIMEDIA

La propuesta lanzada este miércoles por la Comisión Europea de un nuevo objetivo climático intermedio de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero un 90% en 2040 con respecto a los niveles de 1990 suscitó críticas de organizaciones ecológicas, que lo tacharon de “tibio”, de “quedarse corto”, incluir “trampas con los números” y estar “plagado de lagunas”.

La propuesta de Bruselas incluye una cláusula que permite a partir de 2036 compensar hasta un 3% de las emisiones pagando a países de fuera de la Europa comunitaria para que reduzcan su contaminación, en lugar de hacerlo dentro de la propia UE.

Greenpeace indicó que ese objetivo “no está a la altura de la emergencia climática”, además de que “no cumple con las recomendaciones científicas y abre la puerta a hacer trampas para reducir las emisiones menos de lo pactado dentro de la Unión Europea”.

“Esto es una trampa peligrosa que retrasa el abandono de los combustibles fósiles y deja en manos de terceros la responsabilidad que debe asumir Europa”, añadió.

Thomas Galin, responsable de la campaña climática de Greenpeace para la UE, apuntó que “el clima no espera”. “Europa ya sufre los impactos de la crisis climática: olas de calor extremas como la que ahora vivimos, incendios, tormentas o inundaciones como la reciente dana en Valencia, entre otros. La ciudadanía está pagando el precio de una reducción de emisiones europeas que va demasiado despacio”, recalcó.

“MENSAJE CONTRARIO”

Por su parte, WWF consideró la propuesta de Bruselas como “un buen paso, aunque insuficiente”, y añadió que “depender de compensaciones y futuras absorciones podría reducir su efectividad”, por lo que se trata de un objetivo “tibio”.

WWF subrayó que el uso de compensaciones internacionales y futuras eliminaciones de carbono “debilita” el núcleo de la propuesta porque medidas de flexibilidad “reducen la efectividad y credibilidad” del plan de reducción de emisiones a 2040.

Además, esta organización se opuso “firmemente” a las eliminaciones “permanentes” de carbono en el Régimen Comunitario de Comercio de Derechos de Emisión porque ello socavaría la integridad del sistema y reduciría los incentivos para reducir las emisiones de la industria pesada.

Por último, el director ejecutivo de Climate Analytics, Bill Hare, destacó que, con el nuevo planteamiento, la UE “abdica del liderazgo climático” con un objetivo climático para 2040 “plagado de lagunas” que supone un “riesgo de hacer retroceder años de progreso”.

Hare indicó que la "flexibilidad entre sectores" podría ofrecer a los grandes contaminadores “más formas de retrasar la acción real” y que “la doble contabilidad y el fraude también son amenazas reales” en la reducción de emisiones de gases que calientan el planeta.

“Europa fue una vez un contrapeso climático cuando Estados Unidos se retiró durante la primera presidencia de Trump. Cuando Estados Unidos abandonó la ciencia climática y el liderazgo del presidente Trump, la UE dio un paso adelante, forjando nuevas alianzas y protegiendo el Acuerdo de París. Pero esta nueva propuesta llena de lagunas legales corre el riesgo de enviar el mensaje contrario: que cuando se necesita liderazgo, Europa abdica de su responsabilidad”, concluyó.

(SERVIMEDIA)
02 Jul 2025
MGR/clc