Alimentación

La EFSA subraya la “relevancia” del consumo de algas marinas en la “exposición global” a arsénico, cadmio, plomo y mercurio en Europa

MADRID
SERVIMEDIA

Un informe científico de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) sobre la exposición dietética a metales pesados como arsénico, cadmio, plomo y mercurio y la ingesta de yodo en la población europea a través del consumo de algas y halófitas -plantas resistentes a la sal- subraya la “relevancia” del consumo de algas marinas en la “exposición global” a dichos metales pesados y la ingesta de yodo en la población europea.

Para llegar a esta conclusión, en el informe encargado por la Comisión Europea y que fue avalado por el Panel de Contaminantes de la Cadena Alimentaria de la EFSA, este organismo utilizó casi 9.500 datos analíticos disponibles sobre estos metales pesados y yodo entre 2011 y 2021 e identificó un total de 697 ocasiones de consumo de halófitas, algas marinas y productos relacionados con algas marinas en la base de datos completa europea de consumo de alimentos de la EFSA, incluyendo información de 468 sujetos y 19 países europeos.

A partir del consumo de algas marinas, las estimaciones de exposición al cadmio en 'consumidores adultos únicamente' se encontraron “dentro del rango de estimaciones de exposición anteriores considerando la dieta completa”.

En el caso del arsénico inorgánico y plomo las estimaciones de exposición representaron “entre el 10% y el 30% de las exposiciones previas de la dieta completa para la población adulta”.

Las algas también se identificaron como “fuentes importantes” de arsénico total, que se refiere, según los expertos, “principalmente, con algunas excepciones, al arsénico orgánico”.

En cuanto al yodo procedente del consumo de algas marinas, se identificaron ingestas medias superiores a 20 microgramos por kilo de peso corporal al día entre los “consumidores exclusivos” de algas Kombu y Laver.

IMPACTO FUTURO

“El impacto de un futuro aumento en el consumo de algas marinas per cápita en la exposición dietética a metales pesados y en la ingesta de yodo dependerá en gran medida de las algas marinas consumidas”, sentenciaron los expertos, que explicaron que las estimaciones de exposición de la ingesta de metales pesados y yodo en "consumidores únicamente" de algas marinas “fueron similares a las estimadas en un escenario de reemplazo con alimentos seleccionados a base de algas marinas en toda la población”.

Los especialistas reconocieron que se necesita “más trabajo” para “comprender mejor” la “relación” entre el consumo de algas marinas y productos relacionados y la exposición a metales pesados y la ingesta de yodo.

Tras puntualizar que los niveles de metales pesados y yodo en las algas marinas “pueden mostrar una gran variación según el tipo de alga marina” de la que se trate, recomendaron continuar con la recopilación de datos para “caracterizar estas diferencias, considerando también la relevancia, entre otros factores, del origen geográfico, el medio ambiente e incluso la parte del alga utilizada”.

Dado que, a su entender, el procesamiento tiene “un impacto relevante” en los niveles de metales pesados y yodo en las algas marinas, estimaron que el monitoreo “debe extenderse a los productos procesados” y urgieron a la propia EFSA y los Estados miembro a recopilar datos de consumo para “identificar posibles tendencias”.

Según sus recomendaciones, la recopilación de datos debe contener información “completa” sobre las algas analizadas y consumidas, incluyendo una clasificación taxonómica “adecuada” a nivel de especie, pero también detalles sobre si las algas marinas se sometieron a “algún paso de procesamiento o preparación en el hogar antes de su consumo” para poder realizar una evaluación de riesgo.

(SERVIMEDIA)
01 Feb 2023
MJR/clc