La razón de esta mejora no está todavía clara, pero los investigadores creen que podría deberse al hecho de que el ejercicio mejora la circulación sanguínea y la oxigenación del organismo.

La reducción de la irrigación de sangre al cerebro es una de las razones del decliv de la capacidad mental de los ancianos. Igualmente, está demostrado que la práctica de ejercicio físico mejora el tono y el funcionamiento de los músculos. Estos mismos efectos beneficiosos se producen también en el cerebro, según los científicos.

En el estudio se comprobó que ciertas áreas del cerebro relacionadas con la memoria, la planificación y la organización resultaron beneficiadas con la práctica de ejercicio físico. Sin embargo, en otras zonas cerebrales relacionadas con la concentración o ls habilidades psicomotoras no se observó ninguna mejoría.