Los vehículos adquiridos son turismos y furgonetas, 100% eléctricos o híbridos enchufables con una autonomía de al menos 40 kilómetros, que serán distribuidos por toda España y que sustituirán a otros tantos vehículos del Ejército con una media de antigüedad de 17 años. Los vehículos antiguos, más contaminantes, serán retirados de la circulación y convertidos en chatarra.

Se trata, en concreto, de 530 furgonetas, cinco carretillas eléctricas y un turismo eléctricos 100%, y 237 furgonetas y 276 turismos enchufables, que ya han empezado a recibirse y que serán entregados en su totalidad a mediados de noviembre.

AYUDAS EUROPEAS

La compra de estos vehículos se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia aprobado por el Gobierno para canalizar la ayuda procedente de la Unión Europea a través de estos fondos, creados para mitigar el impacto económico en los países europeos causado por la pandemia. Este proyecto prevé un Plan de Transición Energética en la Administración General del Estado, que incluye, entre otras medidas, inversiones orientadas a impulsar la movilidad sostenible.

En este marco legislativo, se cerraron a distintos pactos interministeriales, en virtud de los cuales la Secretaría de Estado de Energía alcanzó un acuerdo interdepartamental con la Secretaría de Estado de Defensa para realizar la reposición de 1.400 vehículos correspondientes al Ministerio de Defensa, de los cuales un mínimo de 996 tenía que ser adquiridos por el Ejército de Tierra entre 2022 y 2023.